Opinión de los expertos del motor

  

En el número 30 del 9 de Junio de 2006, en la sección de "Preguntas a la redacción" se plantean muchas de las dudas que suelen tener todas aquellas personas interesadas en hacer una reprogramación.

 

 
Artículo de Autocity. Magia en tu motor
 
En Autocity no hemos querido quedarnos solo con la teoría para tratar una preparación como es el chiptuning, que se está popularizando no solo entre los aficionados al tuning, sino entre todos los automovilistas que buscan una mejora del rendimiento del motor. Por eso hemos llevado a cabo una prueba completa y exhaustiva, incluyendo mediciones en banco de potencia, necesarias para valorar objetivamente los beneficios que una reprogramación puede aportar a nuestro motor.
El vehículo con el hemos contado para probar la reprogramación es un Mercedes C 270 CDI, un coche que de serie rinde 170cv, y con el que vamos a probar hasta qué punto una reprogramación puede mejorar su entrega de potencia.
 
Proceso:
 
 El proceso es sencillo; el coche llega al taller, y se hace una prueba en el banco de potencia, con la configuración original, que servirá como referencia para cuantificar posteriormente el aumento de potencia y par, y donde la curva obtenida podrá utilizarse como guía si vamos a realizar una reprogramación a medida, para mejorar la entrega de potencia según las preferencias del cliente.
 
Una vez realizada esta medición, un técnico extrae el programa original de la ECU, utilizando un ordenador portátil y un interfaz especial, que se comunica con la centralita a través del conector de diagnosis del vehículo. Este programa original quedará guardado a disposición del cliente.
Una vez leído la programación original, el técnico prepara la nueva cartografía optimizada, que es transferida a la centralita, en cuestión de minutos. Cuando el ordenador indica que la transferencia ha finalizado, la centralita ya está reprogramada.
Es el momento de comprobar los resultados con el banco de potencia, que nos mostrará el aumento de potencia y par, y con el que podremos comparar las dos curvas de potencia, la original y la reprogramada. Sin embargo, no será hasta la prueba en carretera, cuando notemos de verdad la ganancia de potencia.
En el caso de nuestra unidad de pruebas, no solo se hizo patente una ganancia de potencia notable, cuantificada en 23 cv por el banco de potencia, sino una entrega de la misma más lineal, mejorando considerablemente el placer de conducción, como pudimos comprobar en cuanto salimos a la carretera
 
En la carretera:
En las mediciones de aceleración, la mejora fue de casi un segundo en el cero a cien, un valor sorprendente, justificado no solo por la ganancia de potencia, sino por la mayor cantidad de par disponible. Pero donde más notamos la reprogramación, es circulando normalmente por autovía o carretera convencional, donde el motor se muestra más “lleno”, y con una menor presión en el acelerador, obtenemos mayor aceleración que originalmente.
 
Enseguida se hace patente también una mayor facilidad para realizar adelantamientos, o para incorporarnos en los carriles de aceleración, lo que se traduce en unos mayores márgenes seguridad en este tipo de maniobras. Este aumento de la capacidad de aceleración, también viene acompañado de una ligera pero perceptible mayor sonoridad del motor, pues cuando pisamos el acelerador con contundencia se aprecia un sonido un poco más ronco que de origen, lo que puede resultar agradable para algunos conductores, y no tanto para otros.
Para nuestra sorpresa, en las pruebas de consumo que hemos llevado a cabo, hemos comprobado que no solo no aumenta después de la reprogramación, sino que en el caso de la prueba de circulación a velocidad constante de 120km/h, el consumo ha bajado de 5,75 litros a los 100, a 5,60 litros. Esta ligera mejora en el consumo de combustible, se debe a la mayor cantidad de par disponible también a media carga, lo que hace que el motor entregue más par a menos revoluciones.
 
David Ordás, Autocity

14 de marzo de 2008